La accidentabilidad es un grave problema que afecta a más empresas de las que puedas imaginar. Si el mundo de la prevención de riesgos laborales te resulta aún desconocido, te recomiendo que complementes este artículo con la lectura de las 8 claves para reducir el número de accidentes de tu empresa.
La falta de actuación para la prevención de la accidentabilidad, seguridad y salud afecta directamente y de un modo negativo en cuestiones de productividad, competitividad, ambiente laboral, motivación, compromiso del trabajador y un largo etcétera. Por ello, es conveniente que te marques objetivos a corto, medio y largo plazo para trabajar en la integración de una buena cultura preventiva en tu empresa. Y, qué mejor manera de dar el primer paso en esa dirección que aprendiendo algunas pautas esenciales para reducir accidentes laborales de forma óptima.
Diferencia entre medida preventiva y medida correctora
Hay dos conceptos clave que menciono en este artículo y tienes que tener siempre presentes en cuanto a prevención de riesgos se refiere: medida preventiva y medida correctora.
Es necesario que conozcas la diferencia entre estas dos medidas para tomar conciencia de qué debes hacer o incluir en la prevención de tu empresa para crear, de forma eficaz, espacios seguros y saludables.
Una medida preventiva es aquella que tomamos a pesar de que lo que estemos valorando se encuentre, aparentemente, en condiciones correctas. Analizaremos el factor riesgo que puede derivar en accidente y dotaremos de formación y las herramientas necesarias para crear ambientes seguros. Es decir, prevenimos para que un accidente no ocurra. Por ejemplo, una medida preventiva es dotar de guantes a nuestros trabajadores si manipulan objetos cortantes.
Una medida correctora es aquella que deberemos tomar como consecuencia de un riesgo o accidente que está presente o que ya ha ocurrido. Por ejemplo, una medida correctora podría ser la de reforzar los cantos de una máquina después de darnos cuenta de que si la golpeamos podemos herirnos.
Dicho esto, voy a mostrarte las 5 fases que debes tener en orden para reducir accidentes laborales.
5 fases para reducir los accidentes laborales
Teniendo cubiertas estas 5 fases reducirás los accidentes con el mínimo esfuerzo (además de prevenir y minimizar el factor riesgo).
- La primera fase pasa por realizar una auditoría preventiva en tu empresa que plasme la situación actual en la que se encuentra, y determinar e implementar las medidas preventivas y/o correctoras necesarias.
- Después, haz que tus trabajadores perciban el riesgo al que están expuestos y fórmales en lo necesario para que tomen conciencia de cómo desempeñar su trabajo de forma segura.
- En la tercera fase debes establecer políticas y buenas prácticas preventivas entre tus empleados.
- Una vez hecho todo lo anterior, crea canales que promuevan una comunicación preventiva fluida y activa entre todos los equipos de tu empresa.
- Y, por último, invierte en tecnología y estándares para integrar de manera efectiva la prevención en el sistema de gestión de tu empresa.
Bien, ahora ya conoces las fases que sí o sí debes trabajar para reducir de forma optimizada y efectiva la accidentabilidad y tener una empresa segura, saludable y competitiva. Pero quiero mostrarte los 10 pasos a dar, que pasan y completan cada una de estas fases, para reducir la accidentabilidad con menos esfuerzo del que seguro que imaginas.
10 pasos que te ayudarán a reducir la accidentabilidad de tu empresa con el mínimo esfuerzo
- Evalúa los riesgos de tu empresa. Te dará ventaja para preparar un plan de prevención.
- Planifica la actividad preventiva de todas las anomalías que identifiques y define medidas preventivas y/o correctoras. Ordénalas según el grado del factor riesgo, y derívalas a cada responsable de departamento para distribuir el peso de la organización e implementación de las mismas.
- Gestiona los equipos de trabajo y los medios de protección. Procura que cada departamento cuente con los elementos de seguridad necesarios para el desarrollo de su tarea.
- Informa y forma al trabajador de los riesgos que asume durante el desarrollo de su tarea.
- Establece un protocolo de actuación para situaciones de riesgo. Debes tener presente un plan de acción en caso de que se produzca un accidente. A pesar de prevenir al máximo, las personas podemos cometer errores. Así que, debes tener claro qué pasos vas a seguir si te encuentras en esa situación.
- No descuides la vigilancia de la salud de tus trabajadores. Evalúa los riesgos de los trabajadores, ya no solo a nivel individual y particular con revisiones médicas, sino en su lugar de trabajo durante la jornada laboral. De este modo podrás identificar posibles riesgos ligados.
- Documenta todo y establece indicadores para poder realizar mediciones correctas, relevantes, procesables y comprensibles para impulsar los resultados de seguridad. Como siempre digo, “lo que no está escrito en prevención no tiene validez”. La información te dará poder, por lo que cuanta más información verídica recaudes, mayor poder de actuación tendrás en caso de accidente o de pretender preveerlos.
- Procura la seguridad de todos aquellos trabajadores ajenos a la actividad habitual de nuestra empresa mediante medidas cautelares. Cómo por ejemplo, la empresa de limpieza subcontratada.
- Forma e informa a todos los mandos de la empresa y haz que demuestren que han interiorizado el conocimiento. Promoviendo las buenas prácticas conseguirás que tus trabajadores sean embajadores de la PRL y difundirás la prevención por tu organización.
- Implanta un software de seguridad debidamente integrado en la gestión preventiva que te permita gestionar la seguridad en tu empresa. A la vez, trabaja en conjunto con proveedores y contratistas para hacer de los espacios de tu empresa, lugares seguros.
Soy consciente de que no todas las empresas pueden gestionar todos los 10 puntos en su totalidad (y mucho menos sin ayuda). Pero te puedo garantizar que si trabajas en esta línea conseguirás que tu organización sea un lugar seguro en el que trabajar.
¡Ahora te toca pasar a la acción y hacer que tu empresa reduzca la accidentabilidad y vele por salud de sus trabajadores!
Las empresas deben ser productivas para ser rentables, por eso, sufrir un accidente laboral que ponga en juego esta rentabilidad puede afectar gravemente a la eficiencia y evolución de tu compañía.
Recuerda que sin acción no hay prevención. Ahora que conoces los pasos a seguir para reducir tu accidentabilidad puedes ponerte en marcha y trabajar de manera constante y continuada en la disminución de la accidentabilidad en tu empresa.
Antes de despedirme, me gustaría decirte 3 cosas rápidas:
- Si te ha gustado el post y quieres que hable de algún otro tema preventivo, déjame un comentario o bien escríbeme a info@acciopreventiva.com
- Comparte el artículo para que más personas se impliquen en el cambio de la cultura preventiva y consigamos, entre todos, empresas más seguras, más saludables y más competitivas.
- Te espero la semana que viene. Escribiré un artículo muy interesante sobre las responsabilidades laborales, civiles y penales frente a un accidente laboral.