La intervención psicosocial, se hace algo indispensable en nuestras organizaciones.
Las nuevas formas de organización del trabajo, debido a la coyuntura económica en nuestro país durante los últimos años, ha hecho que aumente la cantidad de trabajo, mayor nivel de responsabilidad con las mismas condiciones salariales, y que aumente la velocidad de realizarlas tareas, ya que las empresas cuentan con menos recursos y los que tienen por criterios de eficiencia tienen que optimizarlos.
El resultado es que el estrés laboral es el segundo problema de salud relacionado con el trabajo más frecuente en Europa.
Entre el 50 y el 60% de todos los días de trabajo perdidos se pueden atribuir al estrés laboral.
El 28% de los trabajadores europeos afirma estar expuesto a riesgos psicosociales que afectan a su bienestar mental lo que supone un Coste económico de 240 mil millones de euros al año.
Las consecuencias para los trabajadores que sufren estrés son: Alteraciones emocionales, alteraciones cognitivas, alteraciones del comportamiento, alteraciones físicas y fisiológicas
Por todo ello se hace indispensable diagnosticar los riesgos psicosociales en nuestras organizaciones, y a partir de tener identificados cuales son los riesgos que afectan a nuestra plantilla, establecer un plan de acción, para conseguir eliminar o minimizar esos riesgos, y convertir nuestra organización en una organización saludable, física y psíquicamente.
Un paso más allá en la intervención psicosocial en las empresas
No obstante lo anterior, no deberíamos actuar solo en los aspectos negativos de la psicología tradicional, y poner el foco solo en lo negativo, como los riesgos psicosociales, el absentismo, el conflicto y el estrés laboral, si no ir más allá, hacia una psicología organizacional positiva, centrado en los recursos laborales y su potencial motivador, y para poder prosperar en el proceso de cambio continuo, las organizaciones necesitan tener empleados sanos psicológicamente y motivados, y para conseguirlo las organizaciones necesitan aplicar políticas de recursos humanos adecuadas.
Las organizaciones esperan tener empleados motivados, capaces de trabajar en equipo, proactivos, con iniciativa personal. No podemos pretender conseguir, trabajadores motivados, sin estrés, y con bajo nivel de absentismo, al estilo directivo tradicional de las organizaciones. Sino que hemos de poner en marcha las prácticas de recursos humanos que emergen de la psicología organizacional positiva.
Toda empresa ha de ser consciente de que las personas son el capital más importante, y será más eficiente, productivo y competitivo, cuando sus trabajadores tengan salud y se sientan integrados y valorados por la empresa.
Esto hará que afronten nuevas iniciativas, aumenten sus capacidades de aprendizaje y sus ganas de trabajar en equipo.
Si quieres saber más sobre el estado Psicosocial de tu empresa, puedes contactar con nuestro Servicio de prevención Ajeno.