Tipos y categorías de equipos de protección individual

Un equipo de protección individual -EPI- tiene por objeto proteger la salud y seguridad de las personas trabajadoras.

Por ello, deben existir diferentes equipos que sean capaces de atender a diversas variables como: las partes del cuerpo, el puesto de trabajo que se desarrolla, y los riesgos laborales a los que se está expuesto.

Existen equipos de protección individual parciales y equipos de protección individual totales.

Los equipos de protección parcial, protegen una parte concreta del cuerpo para un tipo de riesgo concreto y, los equipos de protección total, protegen a la persona de forma íntegra frente a un riesgo.

Así mismo, y en función de la parte del cuerpo que protegen, podemos clasificar los siguientes EPIs:

• Orejeras y tapones para proteger los oídos.
• Máscaras y mascarillas para proteger las vías respiratorias.
• Gafas y pantallas faciales para proteger los ojos y la cara.
• Cascos de seguridad y gorras para proteger la cabeza y el cráneo.
• Calzado de seguridad, plantillas de seguridad, calcetines de seguridad y polainas para proteger los pies y la parte inferior de la pierna.
• Guantes, manoplas, manguitos y dediles para proteger las manos y los brazos.
• Delantales y batas para proteger el tronco del cuerpo.
• Ropa de trabajo y buzos para proteger el cuerpo.
• Arneses para proteger a la persona de caídas y alturas.

Categoría I

EPIs de diseño sencillo y que proporcionan una protección ligera. Estos equipos de protección individual ofrecen protección frente a:

• Agresiones mecánicas superficiales.
• Agresiones químicas por productos de mantenimiento poco nocivos.
• Riesgos térmicos con temperaturas menores a los 50ºC.
• Agentes atmosféricos no excepcionales ni extremos.
• Pequeños choques y vibraciones en partes no vitales y con lesiones reversibles.
• Radiación solar.

Categoría II

EPIs de diseño medio que proporcionan una protección intermedia. En esta categoría encontramos:

• Protección frente a riesgos mecánicos medios para manos/brazos y pies/piernas.
• Protección frente a proyección de partículas.
• Todo el equipamiento destinado a proteger total o parcialmente la cara.

Categoría III

EPIs de diseño complejo que proporcionan una protección alta frente a peligros mortales o que puedan dañar gravemente la salud o causar lesiones irreversibles. Un ejemplo muy actual, serían las conocidas mascarillas FFP2 o FFP3.

Los tipos de protección que se necesitan en esta categoría son:

• Protección respiratoria filtrante y aislante de la atmósfera.
• Protección limitada en el tiempo contra agresiones químicas o radiaciones ionizantes.
• Salvaguarda frente a agresiones térmicas.
• Salvaguarda frente a agresiones térmicas por frío estando a unas temperaturas inferiores a los 0ºC.
• Protección frente a caídas de altura.
• Protección frente a riesgos eléctricos.

Equipos de protección colectiva

Los equipos de protección colectiva deben estar incluidos en cualquier plan de prevención de riesgos laborales, el cual debe ser realizado con posterioridad al estudio de riesgos laborales existentes en la empresa.

Y es que, en caso de no poder evitar los riesgos laborales, se deben tomar medidas de prevención colectiva para controlar esos riesgos y proteger así la seguridad en las instalaciones.

Existen muchos tipos de equipos, elementos y medidas, que pueden aumentar la protección colectiva. Por ejemplo, aplicar una buena limpieza e higiene industrial puede conseguir adecuar las instalaciones a los indicadores establecidos. Otra gran aliada de la protección colectiva es la señalización de seguridad y el establecimiento de un orden lógico y eficiente.

También, las barreras de protección acústica y los sistemas de mantenimiento de temperatura, pueden mejorar las condiciones ambientales.

Finalmente, la protección de maquinarias, y las alfombras absorbentes y antideslizantes, pueden mejorar el nivel de seguridad colectiva en la empresa.

En definitiva, la protección colectiva se diseña y se aplica con el fin de eliminar situaciones de riesgos en el trabajo. Por ello, siempre debe priorizarse ante la individual.

En Acció Preventiva te acompañamos e implementamos el plan de prevención de riesgos laborales más óptimo para tu empresa. Además, gracias a nuestra colaboración con TCR Protección, podemos garantizar el suministro de todo tipo de equipos de protección individual y colectiva de cualquier categoría y riesgo.